NARS Lápices para labios irresistibles

Uno de los gestos que más nos embellecen a las mujeres es pintarnos los labios y desde hace un tiempo las barras están compartiendo espacio con los lápices de colores irresistibles como los de Nars.
Son cremosos, fáciles de usar y muy duraderos algo que nos gusta especialmente.
Son lo último a la hora de dar color, un formato que seguro que a muchas os convencerá.
Está demostrado que la venta de barras de labios a nivel mundial supera los mil millones de euros, una cifra que a priori nos puede marear pero que sitúa a este cosmético como el más representativo del atractivo del rostro de una mujer.

Si quieres estar a la última debes de tener en tu tocador al menos un lápiz de color intenso que alegre tu rostro y le de definición a tus labios gracias a que son a la vez un bálsamo, un labial y un gloss por lo que suponen una herramienta de maquillaje perfecta para destacar los labios sin recurrir a los ya clásicos perfiladores antes de aplicar la barra, sin duda un adelanto para las que siempre llevamos este producto en el bolso.

Tienen muchas opciones de acabado y pueden ser una base para las barras tradicionales ya que potencian la duración del color y su permanencia por más tiempo pero si lo prefieres también los puedes utilizar de manera independiente ya que pueden servirte tanto de perfilador como para rellenar todo el labio con sus intensos colores.

Su aplicación es muy sencilla, rápida y precisa porque con un único trazo controlarás mejor el color y lograrás una definición impecable sin mucho esfuerzo y con resultados verdaderamente espectaculares.
Su formato puede que convenza a muchas pero seguro que una vez que te decidas a utilizarlos te convertirás en una verdadera incondicional.

Con toda la gama a tu disposición podrás experimentar y echarle imaginación a tu maquillaje llegando a mezclar dos colores que formen parte de una gama compatible creando así tu color ideal o incluso utilizando uno como perfilador y otro para cubrir el resto del labio si eres atrevida.

El objetivo es simple, conseguir que nuestros labios sean irresistibles y que la duración del color se mantenga sobre ellos el máximo tiempo posible.
La dificultad viene a la hora de elegir el color que más nos gusta ya que muchas veces la oferta es tan atractiva que no podemos decantarnos por uno sólo, un capricho que sin duda podemos multiplicar cuantas veces queramos, ¿no os parece?.