Hoy hace exactamente dos años que comencé esta aventura sin saber muy bien hacia donde podía llegar, hacia dónde podía dirigirme con un nombre tan poco convencional como Married With Nothing, algo así como casada con nadie, una firme declaración de intenciones que esperaba cumplir o por lo menos intentarlo.
Si recordáis no estaba segura de que esta aventura pudiera llegar muy lejos porque no tenía ninguna meta en el horizonte y mira por donde que ¡¡¡ ya han pasado 2 años!!!.
Sí, dos años llenos de muchas cosas, de esas que me gustan, nos gustan, porque aunque comencé a caminar sola muchos os habéis unido poco a poco por casualidad, por curiosidad o porque simplemente os gusta lo que aquí se ofrece.
Como muchas veces os he comentado, detrás de este blog no hay ningún interés comercial, únicamente la curiosidad y las ganas de ofreceros esas cosas que a mí me gustan y que pienso que también os pueden interesar a vosotros, sin más intención que la de divertirme y la de recopilar cosas que me interesan.
No se hacia donde me llevarán mis pasos, tampoco me lo planteo lo que si tengo claro es que os agradezco a todos vosotros el tiempo que dedicáis a pasaros por este pequeño cuarto de estar y a todos vosotros siempre os desearé Mucha suerte para mí y para todos vosotros.
Espero que mi deseo os haya servido durante todo este año y si os animáis me gustaría que siguierais acompañándome a partir de hoy, sin obligaciones, simplemente porque os apetece.
Así que volumen a tope y a disfrutarlo esta vez con muchas ganas para celebrar que llevamos dos años juntos y que quizás puedan ser muchos más, aunque eso ya lo veremos o al menos eso espero.
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