MARIANA BARTUREN Sombreros hechos a medida

Uno de los complementos más elegantes y que dicen más de las personas que los llevan son los sombreros.
Es difícil encontrar el que mejor nos sienta y para ello una buena opción es hacerse uno a medida como los que crea en su taller de Madrid Mariana Barturen, diseñadora gráfica que estudió en Nueva York y posteriormente se introdujo en el mundo de la sombrerería en Parson´s School.
Lo que en un principio era un hobby con el tiempo se ha convertido en una verdadera pasión.

De pequeña aprendió a coser y era muy hábil con las manos y tras su formación, al volver a España montó un estudio de diseño donde hacía catálogos de moda y poco a poco empezó a incluir sus sombreros.
Tras vender 30 al mes, decidió cerrar su estudio y se convirtió en sombrerera.
Desde entonces han pasado más de 15 años y su taller se ha convertido en una especie de jardín repleto de flores de seda, pamelas de colores y exquisitos tocados que se mezclan con sus instrumentos de trabajo: tarlatanas, tijeras, planchas de metal y bolillos entre otros.

Considera que en la creación de un sombrero son importantes el volumen, el color y el estilo que son los mismos parámetros que se utilizan para realizar un logotipo.

Pero lo que considera básico es que encaje en la cabeza y para ello hay que solucionar técnicamente este problema mediante la creación del diseño en tres dimensiones con la ayuda de una horma de madera.

Estas hormas se dibujan y se mandan a que las fabrique un maestro de los que ya quedan pocos.

Después se trabajan los materiales dándoles la forma deseada utilizando fieltro en invierno y panamá en verano.

El número de hormas es tan grande como ideas podemos tener y con ellas se mide la cabeza de las clientes que se prueban los sombreros y posteriormente se diseña la hechura y finalmente se añaden los adornos.

Mariana es una enamorada de los sombreros de Balenciaga ya que le impresiona la perfección de sus patrones.

Siempre trabaja a medida ya que considera imposible hacerlo de otra manera al tratarse de un trabajo  puramente artesanal.

Los sombreros siempre deben encajar a la perfección por lo que esta diseñadora necesita siempre ver la cabeza de sus clientes, palparlas y saber cómo se van a peinar.

En una época en la que los sombreros están más de moda que nunca, son una opción muy interesante a tener en cuenta en celebraciones especiales y si tenéis la oportunidad de haceros uno a medida luciréis maravillosas y tendréis un recuerdo especial a la par que elegante para toda la vida.