Aunque muchas veces nos de pereza cocinar con cazuelas, no podemos renunciar a algunas de ellas como ocurre con las de la emblemática marca francesa Le Creuset.
Están fabricadas en hierro colado vitrificado y siguen siendo las reinas a la hora de repartir el calor de manera uniforme por la base, los lados y la tapadera.
Se la puede considerar todo un clásico, algo así como el fondo de armario de las cocinas.
Esta clásica cocotte como se denomina en Francia la podemos encontrar en diferentes tamaños y colores para poder decidir cual se adapta a nuestras necesidades y gustos.
Posee una tapa del mismo grosor que la cocotte para repartir el calor del interior de manera uniforme y su tirador resiste temperaturas de más de 200 grados.
Sus mangos de hierro son aptos para su uso en el horno o grill y son ergonómicos para una fácil sujeción.
Su esmalte vitrificado no reactivo no absorve la humedad, colores ni olores de los alimentos y permite marinar los alimentos con toda seguridad en la nevera o el congelador.
Además es muy fácil de limpiar y su base lisa puede ser usada perfectamente en todas las fuentes de calor incluida la inducción.
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